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¡Deja de hacer listas de quehaceres!

deja la lista de que haceres

A la gente le gusta crear listas de quehaceres. Los hace sentir productivos y útiles, ya que cada tarea realizada tiene una marca de verificación merecida al lado. En teoría, todas las tareas en una lista diaria se completan, luego, puedes recostarte en tu sofá y felicitarte por haber terminado el arduo día de trabajo.

Pero en la práctica, hay tres grandes problemas con las listas de quehaceres.

Primero, una lista de tareas no toma en cuenta el tiempo. Cuando tenemos una larga lista de tareas, tendemos a abordar aquellas que pueden completarse rápidamente en unos pocos minutos, dejando los elementos mas largos sin hacer. La investigación de la compañía iDoneThis indica que el 41% de todos los elementos de la lista de tareas pendientes nunca se completan.

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Segundo, una lista de tareas pendientes no distingue entre urgente e importante. Una vez más, nuestro impulso es luchar contra lo urgente e ignorar lo importante.

Tercero, las listas de tareas contribuyen al estrés. En lo que se conoce en psicología como el efecto Zeigarnik, las tareas no terminadas contribuyen a pensamientos que distraen y son incontrolados. No es anormal que nos sintamos tan abrumados en el día, pero luchemos contra el insomnio por la noche.

¿Entonces qué hago?

1- Rompe los grandes problemas en trozos manejables

Este consejo funciona para establecer metas, completar grandes proyectos y conquistar una larga lista de tareas pendientes. Divide tu lista en pequeños pedazos que puedes completar rápidamente. Te sentirás mucho más motivado cuando veas una lista que realmente puedes completar en lugar de una que se prolongue durante días. Aquí no hablo de hacer una lista de quehaceres  con tareas pequeñas. Hablo de hacer un mapa: Tomar un proyecto grande y dividirlo en pedazos pequeños.

2- Establece tus prioridades

Es tentador etiquetar los elementos de la lista con un nivel de prioridad asignándoles un valor o equiparándolos con números. Evita designar elementos como prioridad alta, media o baja. No pierdas el tiempo diciendo: «Esta tarea es un nivel 1, este es un nivel 2, y este es un nivel 3.» Probablemente terminarás con muchas cosas que parecen muy urgentes.

Intenta priorizar tu lista visualmente. Organízalos de lo más importante a lo menos importante. Tu elemento más importante está en la parte superior de tu lista, y debes completarlo primero.

Así de sencillo. Empieza a pensar de manera lógica, y empezarás a ver un cambio radical en tu vida profesional y tu vida personal. Ser organizado, es un arte, practícalo.

 

1 comentario

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  1. […] por qué permiten controlar como administras tu tiempo, cuales tareas tienen más importancia (no urgencia, pero IMPORTANCIA). La gente que trabaja conmigo me pregunta regularmente sobre mi rutina: ¿Qué haces de la mañana […]

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