¿Cuándo puedo empezar a gastar mi dinero?

gastar o ahorrar

Existen dos problemas cuando uno empieza a ganar dinero. De acuerdo a tu entorno, tu familia, tus valores, educación, y muchos factores de la vida fuera de tu control, puedes 1) tener miedo de gastar o 2) gastar sin pensar.

No se aplica a todos, muchas personas tuvieron la suerte de crecer en una familia donde se enseñaron valores de gestión del dinero desde niño. Esta publicación se dirige a dos tipos de extremos que tienen poco en común a primera vista, pero que en fin, se parecen muchos en sus excesos. Entonces la pregunta correcta es:

¿Cuándo sé que ya puedo empezar a gastar mi dinero?

Claro, es bueno escatimar y ahorrar y sacrificarte para el futuro, pero es tu dinero, y no debes sentirte mal por disfrutarlo mientras puedas. Vive dentro de tus posibilidades, claro; ahorra para el futuro, claro, pero nunca olvides cómo disfrutar gastando parte de tu dinero en las cosas que amas.

Un cliente me dijo una vez que no quería salir, gastar, viajar etc… por qué quería tener ahorros para dar a toda su familia en su testamento. Le dije: «Está muy bien que quieras dejar algo a tus hijos y nietos, pero el día que lean tu testamento estarás 6 pies bajo de la tierra y ni podrás verlos disfrutar de este dinero.»
Su reacción fue muy rápida, se levantó, empezó a caminar alrededor de su oficina, y me dijo: «Voy a invitar a toda mi familia a un viaje en Europa con todos los gastos pagados.»

En ese momento se había dado cuenta de que podía gastar su dinero para hacer su familia feliz, y compartir el momento con ellos. No se trata de dejarles algo para más tarde. No existe ningún mejor regalo que los recuerdos de unos momentos bonitos.

Sabes que puedes empezar a gastar tu dinero cuando puedes ahorrar lo suficiente para estar bien en caso de emergencia y para invertir. El resto es dinero estancado que no te sirve: Gástalo.

Dependiendo de tu edad es importante considerar unos puntos:

  1. Ahorra, pero solo un porcentaje de lo que ganas
    Ahorrar es importante para los «rainy days», emergencias. Ahorra un porcentaje con lo cual te sientes comod@ que te ayudará para cualquier problema: si tu coche necesita reparaciones, te enfermas, tu hijo se rompe una pierna en la escuela…
  2. Gasta más
    Exactamente: gasta más. Deja de intentar guardar cada centavo bajo de tu colchón, te hace más daño que bien. Tener este mindset hace que te estreses cada vez que gastas dinero, te estresas cada vez que algo inesperado ocurre y te cuesta dinero, te estresas por buscar maneras de gastar menos en cosas que necesitas (agua, gas, electricidad, ropa, hasta comida en ciertos casos). Si tienes un plan financiero para tu casa, asegúrate tener un equilibrio entre lo que ahorras, lo que gastas en gastos fijos, y lo que gastas en entretenimiento.
  3. Aprende a ahorrar
    Ahorrar por ahorrar no te ayuda a crecer financieramente. El día que una emergencia surge, te quedas sin nada. Ahorra para invertir. Ya sea en una cuenta de inversión de tu banco o en proyectos, negocios, acciones, fondos de inversión o cosas más grandes, haz que tu dinero trabaje para ti, en lugar de que trabajes para él. Te darás cuenta que estás ganando dinero adicional para gastarlo en cosas que no querías pagar antes.
  4. Gasta en experiencias
    Gastar en experiencias te permite sentirte más feliz, no arrepentirte de haber gastado dinero, y te ayuda a crecer.
  5. Deja de comprar para impresionar
    Muchas personas compran para impresionar sus amigos, familia, y todos los desconocidos que cruzan en la calle. Sé un gastador inteligente, y te darás cuenta que no tienes que temer gastar si únicamente gastas en cosas que necesitas, y unas pocas que realmente quieres (¡Tu dulce pecado! Todos tenemos unos).

 

No temas al dinero, pero tampoco descuídalo. No todo el mundo tiene la fortuna de tener suficiente dinero para pensar en ese tipo de asuntos, pero tampoco es un recurso imposible a juntar. He tenido dinero, lo he perdido todo, dos veces. Cada vez encontré una manera de ganar aún más que lo que tenía antes. Por qué si lo hiciste una vez, podrás hacerlo de nuevo. Entonces no mueras con más ahorros que puedes gastar en una vida: Úsalo.